El arraigado refrán popular “los empleados entran a las compañías por el trabajo y se van por sus jefes”, no coincide con los resultados obtenidos en la encuesta global realizada por LinkedIn, según la cual los colaboradores se van tras una mejor oportunidad.
La misma, presentada en agosto de 2015 exploró las principales razones por las cuales los trabajadores cambian de empleo. Participaron en la muestra 7 millones de personas que cambiaron de empleo de manera voluntaria durante 2014. Tengamos en cuenta que ésta se trata de una red profesional, por lo cual es probable que la mayoría de los participantes fueran universitarios.
No obstante, para sorpresa de la gran mayoría según el sondeo de la red social la razón número 1 por la cual los colaboradores dicen adiós a su antiguo trabajo es: la oportunidad de hacer carrera que les ofrece el nuevo empleo.
Le siguen en la escala: mejores beneficios y salario, trabajo más motivador, lo cual resulta lógico teniendo en cuenta las 2 opciones anteriores. Sin embargo, en la franja de los millenials esta escala se modifica, aparece como segunda razón de cambio (40%) la insatisfacción con los jefes. Algo similar sucede con la población femenina: el 44% que está dispuesta a abandonar el empleo por descontento con su jefe.
¿Pero a todos nos motivan las mismas cosas? ¿Todas las personas quieren tener una oportunidad de carrera? ¿Es ésta vista como un crecimiento ascendente o puede tratarse de crecimientos laterales?
Estas son algunas de los interrogantes que trae el tema para responder en cada compañía, ya que la particularidad de cada empresa, industria y quienes la componen modificará las respuestas.
Un ejemplo de lo expresado en el párrafo anterior es el BancoEstado de Chile, Rodrigo Rojas, su “Gerente de Felicidad” (así se denomina el puesto), sostiene que la gente no renuncia a las empresas sino a los malos jefes. La entidad parece haber encontrado la fórmula ya que tiene una rotación de sólo el 2%.
En suma los motivos de la rotación también dependen del color del cristal con el que se los mira, por eso es importante tener en cuenta el segmento de negocios sobre el cual se la investiga, por cuestiones estructurales y por qué no también de gestión. La rotación en la banca financiera ha sido siempre menor que en el sector de servicios.
La industria de los contact centers como sabemos tiene una rotación bastante más elevada. Por eso sería interesante comenzar a mirar un horizonte más amplio en lo relativo al tema es decir: investigar, conocer y tomar las mejores prácticas de otras actividades y ver qué se puede aplicar en nuestro sector.